26 octubre 2011

Reciproci... ¿qué?


Hoy, al llegar a casa, no tuve más remedio que aparcar el coche bastante lejos. Además de estar bastante cansada tuve que caminar un tramo. En mi trayecto me crucé de frente con un chico bastante bien parecido que me dijo "hola" pero no lo conocía, así que no le respondí al saludo y seguí caminando. Para cuando llegué al portal de mi casa aún seguía tropezándome con mi estupidez y mi fanfarronería.
Más tarde, tuve que salir a la calle de nuevo y para mi gozo estaban poniendo multas a un par de coches mal aparcados. Saqué la llave del coche y uno de los policías se quedó mirando, a la espera de comprobar si yo era dueña de alguno de aquellos coches. Entonces dije "hola". Pero si hubo respuesta se evaporó antes de que yo pudiera escucharla.
Recordé en ese momento, lo que había ocurrido antes y no pude evitar la asociación. Recibimos lo que damos; llámalo karma, destino, causa-efecto... Aunque creer esto es un acto de fe y sin base que lo sustente, aparece vulnerable frente al arrollador puñado de nombres de "gente buena a la que le ocurren cosas malas" que podría citar ahora mismo. A lo mejor sí que unos nacen con estrella, otros nacen con la luna y otros, con nada. A lo mejor, creer que podemos influir en lo que nos da la vida es creer que tenemos demasiado poder. Pero entre tú y yo, ¿y si lo del factor suerte era mentira? Yo por si acaso, seguiré pensando en positivo pero con los dedos cruzados ;)

3 comentarios:

  1. Puede que el karma sea una tontería y efectivamente sea pretencioso pensar que podemos influir en nuestra vida. Pero... no nos hace mejores personas actuar de forma consecuente con el trato que nos gustaría recibir? A lo mejor ese motivo es suficiente :-)

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  2. Yo soy nueva en esto del karma, pero cada vez me lo creo más... porque mi vida está repleta de cosas paranormales que no pueden tener una solución logica -al menos yo no se la encuentro, jajaja! Pero tienes razon ;)

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  3. Puede sonar como dice Débora a paranormal pero, a mi también me han ocurrido cosas que me hacen pensar que el karma, aunque sea como ente no visible y a veces escurridizo, existe.

    Buena la reflexión Drew, yo lo aplico mucho a mi futura profesión, Trata al paciente exactamente igual que te gustaría ser tratado.

    Buen post compañera! :-)

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