La marcada dicotomía entre el hombre algo mayor y el hombre un poco joven se demuestra porque...
El hombre exigente introduce una pregunta: "espera, responde a esto".
El hombre inexigente, pregunta: "entonces, ¿quedamos?".
Supongo que sabes identificar al mayor y al joven. No es difícil. En ambas situaciones me he encontrado a lo largo de mi soltería voluntaria. Si te preguntas por los de mi misma edad te diré que, tras muchos años de cercana observación, me he convencido de que la generación del 89 no funciona correctamente, viene con algunas taras de serie. Bien sé yo de eso, hay cada elemento suelto por esos mundos... Eliminando a la generación alfa de la ecuación, nos quedan los jóvenes y los mayores. Y yo, a mitad de camino entre los dos, sin descartar a ninguno, me contento sabiendo que puedo ir en ambos sentidos del eje cronológico y encontrar un final satisfactorio en cada uno.
Hasta que conoces al hombre en cuestión. Y te suelta una frase cualquiera de las de arriba; que les gratifica con un viaje al archivo de "contigo no, bicho, ¿cómo te lo digo?".El problema no son ellos, soy yo. Porque a medida que se alejan de un rango de edad cercano al mío, las diferencias en madurez, objetivos y métodos se hacen más evidentes. No quiero una noche de grititos y risitas mientras se hace botellón (ya tuve esa época, jajaja) pero tampoco quiero hablar de nada que implique seriedad (=panico al compromiso). Una amiga me preguntaba el otro día "¿y qué es lo que quieres tú?". Entre ella y yo quedó un sincero "es que no lo sé...".
Me recuerdas mucho a una amiga mía,ella también dice que en nuestra generación no hay chicos que valgan la pena (yo creo que son como los billetes de 500 euros,existen,pero se dejan ver poco),y también me recuerdas a mí misma en la última parte,en la de no saber exactamente que es lo que quiero (y el miedo al compromiso!!).
ResponderEliminarPerdona que te comente en todos los posts,es que esta semana estuve liada con exámenes y me estoy poniendo al día con los blogs :)
Por cierto,lei en uno que querías leer Los pilares de la tierra,es uno de mis libros favoritos,así que te lo recomiendo! Y Un mundo sin fin,la segunda parte (que en realidad tampoco es la segunda parte estrictamente,porque no continúa la historia) también me gusto mucho ;)
Un saludo!
Jajaja! Billetes de 500 euros! de los que sólo se ven en el Banco de España... está claro que hay que ir al punto de origen para encontrar al susodicho en su hábitat natural! :D En plannn, si te gustan los rubios de ojos azules vete a Noruega, si te gustan los surferos, a California... jajaja! Así sería todo más fácil aunque habría una sobremasificación en algunos puntos :P
EliminarGracias por la recomendación! Justo tengo el libro/libraco aquí al lado, abierto por la página 45, a ver qué tal... ya te comentaré! :D
En cuanto a los comentarios ni te preocupes, a mí siempre me encanta que pases por aquí y los escribas ;) Espero que los exámenes no te hayan dejado en K.O. técnico y tengas energías suficientes para lo que tengas planeado ahora! Yo te envío mi onda de positivismo de largo alcance!
Un placer leerte,
Deb!
Supongo que cuándo el hombre algo mayor actúa de ese modo pretende saber si la persona con la que dialoga reúne un mínimo minimorum para mantener una conversación sin tener que levantarse de la mesa al oír, ¡sabes, que fuerte, que fuerte! ¡o sea, se me rompió la uña, o sea, cuándo abrí el bolso Gucci! No obstante, para que suceda cualquiera de las infinitas variantes interpersonales debe haber un camino de sensaciones, acercamientos...y sólo en muy pocos casos aparece un nexo, y nos quedamos con todo lo anterior como parte enriquecedora de nuestro ego.
EliminarPor otro lado el hombre algo joven, sumido por sus hormonas, por la mentalidad propia de la edad, ambiente y medios de comunicación actúa de la manera más eficientemente posible siguiendo el principio de gasto de mínima energía. A esas edades mantener una conversación fuera de GH y Eurocopas cuesta un 300% más de ATP.
Bueno amigo Anonymous, puede ser que tengas razón... Probablemente la tengas. Y perdona si te digo que tú mismo delatas tu edad con tu forma de hablar. ¡Jajaja! Entiendo que un hombre "algo mayor" actúe de ese modo pero también te digo que lo único que transmite es exigencia, prontitud y miedo (te cuento lo que ve la chica). Quizá porque estas cosas requieren 4 dimensiones y la escasez de tiempo entre tanta pregunta, o entre conocerse y las preguntas, es un factor de riesgo. No por mucho madrugar va a salir el sol antes. Además, es precisamente el tiempo de conocerse la delicia de los enamorados. No es un secreto que los comienzos son lo más bonito en cualquier relación.
EliminarEspero haber respondido con lógica
¡Un saludo! :)
PD: fuera del sexo también es difícil para un chico joven no hacer un gasto calórico extra xD
Un hombre "algo mayor"... algo mayor ¿en relación a qué? ¿a la vida media de la mosca del vinagre?
EliminarDesde mi punto de vista te equivocas al respecto de lo que transmite (quiere transmitir) el hombre "algo mayor" o ¿quizás no?... miedo seguro que no, no en vano tiene experiencia en todas sus vertientes; ¿exigencia? seguramente quiere saber a que atenerse para ir asentandose; ¿prontitud? ¿prontitud respecto a que? sexualidad, cariño, algo más...seguramente sea prontitud respecto a tener información...información es poder que dicen.
Los comienzos lo más bonito de las relaciones comentas "Pita Pita Gorgorita" (cuántas veces te habrán llamado así y que cara de leche ácida se te ha de poner)...no recuerdo lo de los inicios, será por que soy un hombre "algo mayor" y mis trasmisiones neuronales están oxidadas por el tiempo; espera, creo recordar algo...tenía nombre de mujer, mujer "ni algo mayor ni algo menor", temperamento y dulzura, fue perfecta hasta que dejó de serlo...así es: qué vivan los comienzos.
¿por dónde comenzamos? yo soy un hombre "algo mayor", ¿y tú?
Querer conocer lo básico de alguien simplemente es buscar el punto de partida para saber si puede existir más adelante "un algo" en cualesquiera de sus infinitas variantes. Quedar con alguien y sentir ganas de huir o que la tierra te trague al escuchar "o sea no, me he roto una uña, sabes no", no es placentero. También creo que si una persona de sexo contrario logra aportarte momentos, no deja de ser en principio más que eso, y que la mente no debe ir más deprisa que el cuerpo y sus vivencias.
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