11 octubre 2012

Agua

Uno no se da cuenta de lo importante que es entre tú y yo hasta que falta... 
Camino del Paisaje Lunar, Vilaflor - Tenerife

Regálame

Nadie me negará que lo mejor de la Vida son las propias experiencias entre tú y yo. Por eso, regálame una cama para que pueda perseguir mis sueños; un billete de ida sin necesidad de regreso; unas botas para que me ponga en camino; y ven tú para que lo recorras conmigo. Pues no es sino el mejor regalo de todos nuestra propia historia, con nuestras victorias y las amargas derrotas. Invierte sólo en aquello que pueda hacerte feliz y que te proporcione lo que necesitas allá donde vayas. Se puede ir ligero de equipaje y con el corazón repleto. No te quedes con la duda, con las ganas o con la vergüenza. Exprime tus posibilidades. Experimenta la Vida.  
Aeropuerto de Lavacolla, Santiago de Compostela

08 octubre 2012

Descifrando las profundidades de tu silencio

Con mi amigo Astérix, Pza María Pita - A Coruña


Créeme, a veces el silencio apetece.
Otras es necesario; muchas, sólo estorba.
¿Por qué si no tenemos boca? 

Ni señales de humo ni código morse; 
sólo un esfuerzo y llegan las palabras.
¿Por qué si no aprendemos a usarlas?

Unas letras de nada en un grupo de palabras, 
y estas a su vez en estrofas adornadas.
¿Por qué si no íbamos a estructurarlas?

Porque el silencio ni se pinta ni se comenta.
Pero si se ha de pintar que sea con colores; 
y si se ha de contar que sea entre tú y yo.


El traicionero silbido de la derrota

Poco ha de trajinar la oscura sombra del desastre para que caigamos presa de las vorágines de la Vida. El impetuoso rugir de nuestras voluntades no es antagonista suficientemente fuerte para encauzar los reveses de las corrientes ni amansar el fluir de un cauce sin márgenes. Sólo el carácter impreso en nuestra persona es rival digno frente a tales desventuras. Pobre de aquel que se deje ahogar por los vaivenes de los ajetreos ordinarios pues, no es sino un infortunio que una persona no crea en el poder de su propia fuerza sin duda, encubierto bajo maleables capas de inseguridades. Bravo por aquel que sí vive para ver madurar el fruto de la paciencia y la sabiduría intrínseca al gran viaje de la Vida, destino él mismo de nuestra existencia. No es sino suyo el mérito y por tanto, el provecho, de una plenitud susurrada entre la brisa y las caricias del viento, que envuelve y acompaña a quien se hace dueño de sus virtudes y surca con pasión entre las mareas de sus propias sombras.   
Cola de huracán que pasó por las Islas Canarias, feb 2010

05 octubre 2012

entre estrellas

Quién adivinara en las estrellas el futuro y fuera hechicero para calcular a ojo un embrujo que funcione. Resolvería alguna ecuación con múltiples incógnitas y despejaría de mi mente las dudas. Pero es sólo del humano menester, moverse entre incertidumbres y caminar a pie. Quién viviera en las estrellas y brillara en la oscuridad del vacío sin algoritmos. Soñaríamos las respuestas de nuestras operaciones y nos saldríamos y yo por las tangentes del cielo. Pero una vida errante, en silencio y bamboleando entre gravedades no es existencia que se aprecie. Porque si me preguntas qué quiero te digo, cualquier colisión imprevista que pueda cambiarnos de signo y si me dices que escoja será, aquello que me lleve contigo.